Silencios



domingo, 25 de enero de 2009

Un "vale" y una cita.




- Vale.
- Vale.



"Feliz es el destino de las vírgenes vestales, pues olvidan al mundo y el mundo las olvida a ellas; Brillo eterno de la mente inmaculada, cada oración aceptada y cada deseo renunciado."



martes, 23 de diciembre de 2008

Un camino.




¿Como le dices adiós a alguien
que no te imaginas poder vivir sin él?
No le dije adiós,
no le dije nada.
Solo me aleje.
Y al final de esa noche,
decidí tomar el camino más largo
para cruzar la calle.
Mi propio camino.




sábado, 13 de diciembre de 2008

Un gato



Chofer, Pare aquí un momento...

¿Sabes lo que te pasa? no tienes valor. Tienes miedo, miedo de enfrentarte contigo misma y decir, esta bien, la vida es una realidad, las personas se pertenencen las unas a las otras porque es una la unica forma de
entender el amor.

Tú te consideras un espiritu libre, un ser salvaje y te asusta la idea de que alguien pueda meterte en una jaula. Bueno nena, ya estas en una jaula tu misma la has construido y en ella seguiras vayas a donde vayas. Y no importa a donde huyas, siempre acabarás tropezando contigo misma.

Toma hace tiempo que lo llevo encima, ya no me hace falta.



lunes, 8 de diciembre de 2008

Dos ¿replicantes? ¿humanos?





Rachael: Cree que soy una replicante, ¿verdad? [ Rachael muestra una foto a Deckard ] Mire. Soy yo con mi madre.

Deckard: Sí. ¿Recuerda cuando tenía seis años? Usted y su hermano se metieron en un edificio vacío por la ventana del sótano. Iban a jugar a médicos. Él le enseñó su sexo, y, cuando le tocaba hacerlo a usted, se avergonzó y corrió. ¿Lo recuerda? ¿Nunca se lo ha contado a nadie? ¿A su madre? ¿A Tyrell? ¿A alguien?¿ Recuerda ese avión de papel que recogió del suelo durante el patio de colegio? Nunca supo de donde vino, pero al desmontar el avión se encontró con la pregunta de toda la vida...

Rachael: ...la pregunta de toda la vida...

Deckard: Pero...

Rachael: Pero ahora ya no la recuerdo.

Deckard: Implantes. Esos no son sus recuerdos. Son los de algún otro: los de la sobrina de Tyrell.

Deckard: Está bien. Un mal chiste. He hecho un mal chiste. Usted no es una replicante. Váyase a casa, ¿de acuerdo? No, no, de veras. Lo siento. Váyase a casa. ¿Quiere una copa? Le serviré una. Voy por ella.


jueves, 4 de diciembre de 2008

Un recuerdo, un homenaje y una maja persona.





Chocolate


¿Sabes en qué pienso
mientras saboreo
este chocolate relleno de cerezas de licor?
Mientras la amargura del chocolate se mezcla
con la empalagosa dulzura del licor y las cerezas,
¿Sabes en qué pienso?

¿Sabes en qué pienso
mientras mi lengua acaricia
la aspereza del chocolate,
la liquidez del licor,
la suave textura de las cerezas?
Mientras imagino el chocolate negro,
el licor amarillento
y las rojas cerezas,
¿Sabes en qué pienso?

¿Sabes en qué pienso mientras evoco
el dulce aroma de este chocolate relleno de cerezas de licor?
¿Sabes en qué pienso?

Pienso en ti.
Pienso en que has sido para mí
como este chocolate relleno de cerezas en licor,
amargo pero dulce,
áspero pero suave,
negro pero rojo.
Pienso en que has sido todo para mí,
pero que ahora no eres nada.

Y pienso que se te olvidó,
o quizás se me olvidó a mi,
bueno,
se nos olvidó,
a los dos,
que lo que une al chocolate con las cerezas,
es el licor.



miércoles, 3 de diciembre de 2008

Una noche de verano.





Voy a quedarme aquí todo el tiempo que haga falta.
Estoy esperando la casualidad de mi vida, la más grande.
Y eso que las he tenido de muchas clases.
Si, podria contar mi vida creyendo en casualidades.

...

Puede ser que las vidas tengan varios círculos.
Pero la mía, mi vida va en linea recta.
No falta nada más.
Y aquí ahora mismo no puedo llegar a ningún destino.
Estoy solo. Y no hay destino alguno.



domingo, 30 de noviembre de 2008

Una Dedicatoria.



DEDICADO A MEI


Pido perdón a todos las Anas por haber dedicado este libro a una Princesa. Tengo una excusa seria: esta Princesa en su día fue Ana. Tengo otra excusa: esta Princesa puede entenderlo todo, hasta las casualidades. Tengo una tercera excusa: esta princesa ahora está enterrada. Tiene mucha necesidad de ser consolada. Si todas estas excusas no son suficientes, quiero dedicar este libro a la Ana que esta princesa fue. Todas las princesas en algún momento fueron como Ana. (Pero pocas lo recuerdan). Corrijo entonces mi dedicatoria:


DEDICADO A MEI
CUANDO FUE ANA